Consejos – BestDrive

El nuevo etiquetado del neumático te ayuda a elegir los neumáticos que mejor se adaptan a ti

Nueva etiqueta de la UE: claves

Desde el pasado 1 de mayo está en vigor la nueva etiqueta del neumático de la Unión Europa, que viene a mejorar y completar la que ya existía. Pero, ¿cómo afecta esto al consumidor? Veamos las novedades.

La etiqueta es un requisito de la Comisión Europea para proporcionar información al consumidor sobre el rendimiento del producto para que puedan realizarse fácilmente comparaciones entre fabricantes. El objetivo es fomentar productos más seguros, energéticamente más eficientes y silenciosos.

Los neumáticos, principalmente debido a su resistencia a la rodadura, representan del 20 al 30% del consumo de combustible, por lo que reduciendo la resistencia a la rodadura se contribuye incrementar la eficiencia energética y a reducir las emisiones de los gases de efecto invernadero.

La mejora los datos de la etiqueta permitirá a los consumidores obtener una información más relevante y una mayor capacidad de comparación sobre eficiencia energética, seguridad y ruido y, de este modo, adquirir productos más respetuosos con el medio ambiente, al tiempo que se mejora el ahorro para el usuario.

En concreto, la etiqueta ha actualizado la clasificación de eficiencia energética, de agarre en mojado (distancia de frenado en una superficie mojada) y la emisión de ruido de rodadura de los neumáticos. En concreto, a partir de ahora, la etiqueta también muestra si el neumático es adecuado para su uso en nieve o en hielo con los siguientes gráficos:

Además, la nueva etiqueta incorpora un código QR que conecta a la base de datos EPREL (Base de Datos Europea de Productos para Etiquetado Energético, en sus siglas en inglés) de la Unión Europa. Escaneando este código, los consumidores acceden a la información de cada neumático: la hoja técnica del producto, con detalles de la gama, dimensión, carga y velocidad del neumático, así como las calificaciones de la etiqueta.

Toda esta información aparece en la misma escala de colores y disposición que en la etiqueta anterior: en la zona superior, aparecen la marca, modelo y dimensión del neumático, junto con el código QR; en la parte central, a la izquierda, se muestra la eficiencia energética y, a la derecha, el comportamiento en mojado, y, por último, debajo, se los datos de contaminación acústica y adherencia en condiciones de nieve y hielo. Este es un ejemplo de etiqueta:

Debemos recordar que la etiqueta no se aplicará a los neumáticos disponibles en el mercado de la UE antes del 1 de mayo de 2021 o cuando los neumáticos estén exentos de los requisitos de etiquetado, entre otros, los neumáticos P.O.R. (Off Road Profesional, en inglés) o aquellos diseñados para montarse únicamente en vehículos matriculados por primera vez antes del 1 de octubre de 1990.

En este vídeo, el simpático ‘neumático’ de AFANE, Cristóbal, te explica todos los detalles de la nueva etiqueta europea del neumático, que entró en vigor el pasado 1 de mayo. En poco más de un minuto te ofrece todas las claves del nuevo diseño.

3 consejos para pulir los faros de los coches

Casi a todos nos ha pasado, o hemos visto en algunos coches, los faros mates. ¿Pero sabemos por qué motivo ocurre esto?

El faro de un coche por seguridad de ocupantes y viandantes, en caso de atropello o de accidente, son de un material plástico por lo general en policarbonato. Esto hace que en caso de colisión los faros del coche no produzcan lesiones graves por culpa de los cristales del faro.

Esto que es beneficioso en cuanto a seguridad, hace que sea un problema en cuanto a estética y visibilidad del vehículo, sobre todo por que pierde mucha la eficacia del faro. Ya sea por la exposición a la luz del sol, las inclemencias del tiempo, los impactos de insectos, gravilla, etc. Todo esto hace que se nos vea peor y nosotros vemos también menos. Pero por suerte con un simple truco casero podemos dejar la superficie del faro como casi nuevo.

¿Cómo pulir los faros de un coche?

El truco de la pasta de dientes.

Como hemos dicho, y seguro habrás oído, con pasta de dientes y un trozo de papel podemos dejar casi como el primer día nuestros grupos ópticos. Pero este truco es pasajero, ya que según estén de degradados nuestros faros podremos utilizar este método o no. Ya que limpiar los faros no es tarea fácil y menos dejarlos lo mejor posible, por eso la pasta de dientes es buena siempre y cuando no estén muy degradados nuestros faros.

Para pulir los faros con pasta de dientes, lo que necesitaremos será; la pasta de dientes, limpiacristales y papel de cocina. El método es muy sencillo.

Aplica la pasta de dientes sobre el faro toda ella muy bien extendida y en círculos con el trozo de papel absorbente de cocina. Luego aplicamos el limpiacristales sobre el faro y con otro trozo de papel limpiamos la superficie.

Para que quede mucho mejor protegido, podemos aplicarle una capa de barniz transparente al faro y así resguardar nuestro faro un poco para que nos dure algo más el tratamiento que le hemos realizado. Porque hay que tener en cuenta que hemos aplicado unos componentes que han corroído la superficie de nuestro faro.

El pulimento especializado para faros.

Pero si queremos dejarlos mucho mejor, con el pulimento de faros los dejarán impecable. Pero si al final decidimos hacerlo nosotros mismos, hay que tener mucho cuidado y tener en cuenta que necesitaremos un kit de pulimento que se compone de pulimento líquido o en pasta.

Para aplicarlo necesitaremos de una lijadora o un taladro con discos de lana, agua y jabón, un trapo de algodón para eliminar los restos y cinta de carrocero para que protejamos la carrocería de nuestro vehículo.

Para proceder a la limpieza de nuestro faro lo primero que debemos hacer es encintar el borde del faro con la cinta carrocera. Después limpiaremos toda la superficie exterior de nuestro faro con agua y jabón, así dejaremos la superficie impoluta para poder proceder a pulirlo. Una vez hayamos secado el faro, procederemos a lijarlo con una lija de agua de diferentes granulados, así iremos de la más gruesa a la más fina y con movimientos circulares.

Cuando creamos que este bien lijado nuestro faro, limpiamos la superficie con agua sin jabón para eliminar los restos de plástico que puedan haber quedado en el proceso de lijado.

Ahora solo queda aplicar el pulimento líquido con siliconas especializado. Debemos aplicarlo de forma muy homogénea para que el pulimento aplicado entre en todos los poros del policarbonato del faro. Luego pasamos la pulidora con un disco de lana frotando sobre toda la superficie de este. Si vemos que no ha quedado todo lo homogéneo que deseamos, podemos volver a aplicar el pulimento, pero esta vez podemos probar a aplicarlo directamente desde el disco.

Por último solo tendríamos que pasar otro disco de lana, pero esta vez sin pulimento, dejar un par de horas hasta que se seque todo y ya tendremos nuestro faro en perfectas condiciones.

Pulir los faros en un taller

Lógicamente es la opción más rápida y con menos inconvenientes, ya que el precio de pulir faros de un coche no es muy elevado si lo comparamos con el precio de un faro nuevo. Esta opción además de ser más duradera, es una garantía que un profesional pula los faros, ya sea para poder pasar la ITV, por seguridad o por estética.

Los precios pueden variar de un taller a otro, pero los precios suelen rondar entre 60 a 40€ según la zona y el taller. Pero desde Eurotyre aconsejamos que por ese precio tendremos la garantía de un profesional.

¿Cuál es la que harías tú?

4 Consejos claves para tener tu moto al día

Los que tenemos motos más de una vez nos ha pasado a la hora de hacer cualquier mantenimiento, o necesitamos hacer la revisión de nuestra moto, que no sabemos cuáles son las cosas básicas para tener nuestra moto a punto. Por eso desde BestDrive queremos darte estos 4 consejos prácticos para un mantenimiento básico de tu moto.

Sistemas de seguridad

Lo más importante en cualquier revisión de una moto, es la revisión de los sistemas de seguridad; pastillas de frenos, frenos, discos y neumáticos…etc. ya que con estos sistemas tendremos casi el 50% ganado en la seguridad de la conducción de la moto.

Estos elementos son los más sencillos de revisar, ya que algunos con una simple ojeada rápida podemos hacernos una idea de cómo están. Y sabiendo que tienen un periodo de vida útil limitado, a veces escaso, es aconsejable revisarlos periódicamente.

Para revisar los frenos y las pastillas es mejor llevarlos a un taller como en BestDrive. Es en los talleres donde te revisarán todos los componentes del sistema de frenado; liquido de bombines, pastillas…etc que harán que el frenado de la moto sea muy bueno.

Neumáticos

Unos buenos neumáticos nos hacen evitar daños y el sufrir accidentes por un mal agarre de nuestra moto. Es primordial revisar periódicamente la presión y el dibujo de los neumáticos de nuestra moto, si presentan algún agrietado, cortes o deformaciones del neumático. Ya que estos serían indicadores clave de que nuestras cubiertas necesitan un cambio urgente.

Motor y refrigerante

El motor es como el corazón y pulmones de nuestra moto, si los tenemos cuidados ellos cuidarán de nosotros y no nos dejarán tirados en cualquier situación. Por eso debemos revisar algunos elementos esenciales en el mantenimiento del vehículo, como por ejemplo el cambio del filtro de aire. Especialmente si con tu moto circulas por terrenos con bastante polvo, ya que estarán más expuestos y pueden atascarse mucho antes. Lo aconsejable es cambiarlo cada 30.000 kilómetros, pero depende de las especificaciones del fabricante en los tiempos de revisión de moto.

Otro elemento clave de nuestro mantenimiento es tener limpias las bujías, si es una moto de 2 tiempos y las válvulas de motor si son de 4 tiempos. Mantener estos elementos del motor en un estado óptimo hará que nuestro motor ronronee como un gatito.

No podemos olvidar en cualquier revisión de tu moto el cambio de aceite y filtro de aceite. Es esencial para la vida del motor, además debemos seguir los consejos del fabricante para los tiempos y kilómetros en su cambio. Por eso desde BestDrive aconsejamos revisar y cambiar periodicamente los niveles de líquidos, ya sea de aceite, refrigerante o nivel del líquido de frenos.

Siguiendo con la revisión básica de nuestra moto. La correa de distribución es otro elemento que debemos revisar, aunque no suele tenerlas todas las motos, solo las de gran cilindrada. Pero es aconsejable echarle un vistazo.

Luces

Revisar las luces es sencillo, si no se enciende algo pasa. Lo esencial cuando conducimos es ver y que nos vean, por eso este sencillo acto es imprescindible para la seguridad vial. Cambiar las luces es rápido y casi sin esfuerzo en cualquier moto, pero si el problema no es de las bombillas de nuestra moto lo más aconsejable que la llevemos a un taller de garantía como BestDrive.

Con estos sencillos pasos tendremos un mantenimiento básico garantizado para poder disfrutar de nuestra entrañable amiga de aventuras en carretera. Tener tu moto a punto y disfrutar de ella es lo que más te importa y a nosotros que puedas disfrutar de momentos inolvidables y SEGUROS, gracias al mantenimiento que le has realizado.

Cuéntanos tus experiencias y dudas, estaremos encantados de solucionarte cualquier pregunta que necesites… ¡A qué esperas!

¿Por qué elegir neumáticos Continental?

Seguro que ya conoces nuestros neumáticos Continental y las innumerables ventajas que presentan. Pero por si acaso, hemos preparado este nuevo post en el que queremos compartir contigo, algunas de las razones principales por las que elegir neumáticos Continental es y será siempre, la mejor opción.

Continental es seguridad, excelencia, innovación y mucho más. Pero antes, ¿sabes por qué los neumáticos son tan importantes durante la conducción? Tu seguridad en la carretera comienza desde el primer contacto y los encargados de esta conexión primera son los neumáticos. Incluidos en el denominado triángulo de seguridad, unos buenos neumáticos son esenciales para garantizar una conducción de confianza, contribuyendo en la mejora de la estabilidad del vehículo, su adherencia al asfalto y el mejor rendimiento.

Neumáticos Continental, la confianza de un líder

Los neumáticos Continental son sinónimo de seguridad, calidad, durabilidad y ahorro de combustible. La excelencia de Grupo Continental, proveedor líder en soluciones globales para el automóvil, puesta al servicio de sus neumáticos.

Una amplia gama de neumáticos para todo tipo de vehículos que responde a las máximas exigencias en carretera. Neumáticos para Turismos, motos, camiones, agrícolas… Todo lo que necesitas con tecnología de última generación, máxima fiabilidad y las mejores calificaciones en los tests más exigentes del momento.

¿Por qué elegir Neumáticos Continental?

Son muchos los motivos te harán decidirte por neumáticos Continental, pero no cabe duda alguna que las razones de mayor peso son las que te contamos a continuación:

Ahorro en combustible
Es importante seleccionar unos neumáticos de alta calidad y que te ayuden a conseguir un importante ahorro en combustible. Con neumáticos Continental conseguirás disfrutar del máximo ahorro ya que están pensados para obtener el mejor rendimiento en el consumo de combustible durante la conducción.

Conducción silenciosa
Nuestros neumáticos Continental cuentan con la mejor tecnología del mercado, que permite la reducción de ruido en la rodadura lo que significa que su utilización permite una conducción silenciosa y sin contaminación acústica.

Eficiencia energética
Los neumáticos Continental no han sido valorados como uno de los mejores de la Fundación CEA por casualidad. Continental con su neumático Eco 6, consigue uno de los mejores valores de etiqueta energética. Este modelo se caracteriza por su alto componente tecnológico, resultado de su eficiencia energética es bien conocida ya que el grado de impacto que generan sobre el medio ambiente es muy reducido. Además, Continental se caracteriza por la investigación continuada en materia de sostenibilidad, empleando novedosos materiales alternativos.

Máxima seguridad
Lograr un buen agarre en la carretera, incluso en aquellas condiciones climáticas más adversas, se presenta como una clara necesidad. Unos buenos neumáticos han de ser capaces de brindar una adecuada adherencia y frenada, que evite que el coche resbale en la carretera y sea capaz de frenar adecuadamente. Los neumáticos Continental se caracterizan por garantizar el máximo agarre, mayor control y completa adherencia en todo tipo de terrenos.

Componentes de alta calidad
Continental, en su desarrollo de los nuevos compuestos, consigue no solo mejoras de seguridad y rendimiento en la conducción, sino que consigue rebajar los niveles de emisiones satisfaciendo las necesidades de los principales fabricantes de automóviles. Ha apostado por una continua política de mejora en sus neumáticos, desarrollando neumáticos únicos radiales con cinturones de acero, que mejoran su diseño y aumentan su funcionalidad.

Perfectos para todo tipo de vehículos
La completa gama de neumáticos Continental es perfecta para cualquier tipo de vehículo. Con desarrollos exclusivos y pensados para ofrecer lo mejor en cada tipo de automóvil, los neumáticos Continental ofrecen prestaciones adaptadas y el mejor rendimiento en cada momento.

Tecnología inteligente
El Centro de Innovación de Grupo Continental trabaja para garantizar las mejores soluciones en materia de neumáticos. Así, se han realizado desarrollos exclusivos con neumáticos que integran sensores inteligentes que permiten un mayor control de su estado y una mejor monitorización del neumático, además se han desarrollado soluciones de movilidad extendida como se han incorporado novedades ContiSeal, desarrollada para sellar los neumáticos en caso de pinchazo. Por último, otras tecnologías como la SSR o runflat. Además, otras soluciones como ContiSilent que permiten un mayor confort de conducción, reduciendo el nivel sonoro en el interior del vehículo.

Equipamiento original
Neumáticos Continental se ha convertido en una de las marcas favoritas de los fabricantes de coches. Y no es casualidad. Porque Continental es sinónimo de fiabilidad, garantía y seguridad. De hecho, uno de cada tres coches, ya monta neumáticos Continental de origen.

Ya lo ves, elegir neumáticos Continental significa apostar por una marca líder que te facilita todos los beneficios que siempre has buscado en un neumático y que te permite encontrar siempre el neumático perfecto para tu tipo de vehículo. Ahora, solo nos queda invitarte a conocer nuestro “Buscador de Neumáticos”, la herramienta más avanzada que te permite encontrar en unos sencillos pasos, los neumáticos perfectos para ti. Échale un vistazo y cuéntanos cuál es tu favorito. Y recuerda, una vez que lo selecciones, siempre puedes pasar por tu Taller BestDrive más cercano para montar tus nuevos neumáticos Continental.

Mal olor en el aire acondicionado, ¿por qué se produce?

Seguro que en alguna ocasión has experimentado ese mal olor del aire acondicionado de tu coche y te has preguntado por qué sucede esto. Cuando llega a tu nariz, automáticamente detectas que no proviene del exterior del vehículo, viene del propio sistema de aire acondicionado. ¡Y es realmente desagradable!

¿Cuáles son las causas del mal olor en el aire acondicionado?

En principio, el aire no tiene un olor definido cuando ha pasado por el filtro. Pero el paso de los años y el no haber realizado de manera periódica sus correspondientes revisiones de mantenimiento, provocan que se produzca ese mal olor del aire acondicionado que tanto nos desagrada.

El sistema del aire acondicionado tiene un filtro de partículas cuya función consiste en purificar el aire y expulsar la humedad que se genera. Con el tiempo, se acumula humedad en los conductos del sistema, dando lugar a la aparición de algunas bacterias o incluso moho.

Esta humedad, la gran mayoría de las veces suele terminar en el filtro del aire y si no lo revisamos o cambiamos de manera regular, las bacterias comenzarán a descomponerse generando ese mal olor en el aire acondicionado del que hablamos.

Por eso, es muy importante realizar las revisiones en el momento adecuado, evitando estos malos olores. Dependiendo del ambiente donde vivas, habrá que cambiarlo más o menos veces. Ten en cuenta que existen factores como el polvo, la suciedad, polución…que influyen bastante.

Tampoco podemos olvidar la importancia del correcto funcionamiento del filtro antipolen, ya que otra fuente de malos olores en el aire acondicionado puede venir de la descomposición del polen junto con la humedad.

El mal olor del aire acondicionado es algo a lo que normalmente no prestamos demasiada atencia, pero puede generar más problemas de los que a priori parecen. Por ejemplo, se llegan a presentar casos en los que afectan a la salud de las personas, provocando reacciones alérgicas, estornudos, tos, picor en los ojos…

Soluciones para combatir el mal olor del aire acondicionado

Si tu sistema de aire acondicionado ya huele mal, la mejor solución es cambiar los filtros de aire y polen. Evitarás que se produzcan malos olores y que todo esto pueda derivar en mayores problemas para tu coche.

Es frecuente creer que con el uso de algún espray, acabamos con el mal olor. Sin embargo, esto no combate la raíz del problema y en un futuro el mal olor del aire acondicionado reaparecerá. Por tanto, el uso de estos productos no es una solución definitiva. Recuerda, más vale prevenir que curar, así que el mejor antídoto para evitar malos olores es realizar las revisiones de tu vehículo en el momento oportuno.

Si quieres saber más información sobre cómo realizar un mantenimiento adecuado del sistema de climatización, te invitamos a pasar por este otro post en el que te lo contamos todo. Y finalmente, no te olvides que en BestDrive con tres tipos de menús de climatización, para que selecciones el que mejor se adapte a las necesidades de tu coche. Di adiós a los malos olores y conduce siempre con el máximo confort.

Sistema de suspensión del coche, cómo detectar posibles fallos

Cuando pensamos en nuestro coche y su mantenimiento, normalmente nos fijamos en aspectos como los filtros del aire, aceite, neumáticos, pastillas de freno o escobillas. Pero en la gran mayoría de las ocasiones, nos olvidamos de aspectos como el sistema de suspensión del coche. Por eso, hoy queremos que conozcas más información sobre el tema y algunos consejos sobre este sistema de suspensión del vehículo. ¡Sigue leyendo!

Qué es el sistema de suspensión del coche

Antes que nada, queremos que tengas muy claro de qué vamos a hablar. Cuando nos referimos al sistema de suspensión del coche, hablamos de una serie de elementos mecánicos que unen la parte suspendida del vehículo con la superficie rodante.

La finalidad del sistema de suspensión es la de absorber las irregularidades del terreno y asegurar que los neumáticos estén en contacto continuado con la carretera, posibilitando que el coche ofrezca una mayor adherencia.

El sistema de suspensión también permite corregir las transferencias de masas cuando llevamos a cabo acciones de frenada o giro, siendo fundamental para la estabilidad del vehículo.

Aunque siempre se piensa en este sistema como un medio de confort, debes tener claro que es un elemento fundamental en la seguridad del vehículo, que conforma el denominado triángulo de seguridad del coche junto con los neumáticos y frenos.

Elementos del sistema de suspensión del coche

Un sistema de suspensión está compuesto por un conjunto de elementos que hacen posible que cumpla su función. Cada uno de ellos, tiene una determinada utilidad y permite que el resto del sistema pueda desempeñar adecuadamente su labor. Así, los principales son:

– Muelle. El primero de los componentes que nos encontramos es un sistema elástico. Normalmente se trata de un muelle, aunque algunos fabricantes y según el modelo, lo sustituyen por una barra de torsión o ballestas. El objetivo de este muelle es unir la zona de rodadura con el resto del vehículo, recoger las irregularidades del terreno y absorberlas para evitar deformaciones. Estos muelles normalmente están fabricados en acero y en función de su tensión, serán capaces de ejercer una determinada fuerza.

– Amortiguadores. La principal misión del amortiguador de un vehículo es la de reducir las oscilaciones que se producen en el elemento flexible (muelle, barra de torsión o ballesta), oponiendo resistencia a la compresión y extensión de los mismos. El amortiguador trabajará para limitar la velocidad de ascenso del muelle y para evitar el denominado efecto rebote.

– Brazos de suspensión. Se trata de elementos articulados que están situados sobre el chasis del vehículo y cuya principal función es soportar el peso del automóvil a través de la suspensión.

Además de estos elementos que son considerados los principales en el sistema de suspensión del coche, existen otros de menor relevancia como los denominados silentblocks (elementos aislantes), rótulas, mangueta, buje o tirantes de suspensión.

Recomendaciones para detectar problemas en el sistema de suspensión

Como ya has visto, la suspensión está conformada por un grupo de elementos variados, que cumplen una misión determinada. El correcto funcionamiento de la suspensión depende de que todas estas piezas también funcionen de manera adecuada. Pero, como el resto de componentes de un coche, el sistema de suspensión también se deteriora y sufre desgaste con el paso del tiempo o los kilómetros recorridos; además de otros factores como el clima o el estilo de conducción. En ese sentido, ¿cómo se pueden detectar posibles problemas en el sistema de suspensión del coche?

1. Fíjate bien en los neumáticos de tu coche. Si observas que existe un desgaste asimétrico, se tratará de un claro problema en los amortiguadores del vehículo. Asimismo, si al conducir sientes que existe un efecto rebote de los neumáticos sobre el pavimento y se produce algún ruido; es probable que se deba a un problema con la suspensión.

2. Presencia de manchas húmedas de aceite en los amortiguadores. Esto se suele deber a alguna deficiencia en el sistema de suspensión y con el paso del tiempo, esas manchas se pueden convertir en suciedad o incluso tierra.

3. Vibraciones en el volante. Si esto te sucede, es muy posible que la amortiguación delantera no se encuentre en buen estado y será recomendable que acudas de manera inmediata a tu taller de confianza.

4. Rebote acentuado. Si al conducir notas que el coche rebota en exceso, posiblemente se deba al desgaste de los amortiguadores producido especialmente al conducir por zonas con asfalto en mal estado.

5. Suspensión muy dura o excesivamente blanda. Esta es una manera fácil de saber si tienes un problema con el sistema de suspensión del vehículo y se nota si al conducir, sientes una incomodidad excesiva al realizar determinadas maniobras como girar.

¿Has notado alguno de estos síntomas? Entonces ha llegado el momento de hacer una revisión del sistema de suspensión de tu coche. Recuerda que estamos hablando de un elemento fundamental para la seguridad en carretera que debes cuidar y conservar en perfectas condiciones y, aunque no podemos evitar su desgaste, sí podemos asegurarnos de que siempre se encuentre en las condiciones más óptimas para circular de la forma más segura posible.

Acércate a tu taller BestDrive más cercano localizándolo en nuestro “Buscador de Talleres” y solicita ya una revisión del sistema de suspensión. ¡Tu seguridad es fundamental para nosotros! #YouDriveWeCare

Claves para comprar neumáticos de invierno

La seguridad es un elemento fundamental que debemos tener en cuenta a la hora de conducir. Además, debemos pensar en los factores externos que influyen en la misma, ya que no es lo mismo conducir en invierno que en verano. Cuando se acerca la época más fría del año es importante preparar nuestro coche y comprar neumáticos de invierno adecuados para nuestro vehículo. Existen ciertos parámetros que debes tener en cuenta cuando vayas a elegir los neumáticos que utilizarás para la conducción y así poder sacarle el mayor partido posible. Colocar en tu vehículo neumáticos de invierno es importante para la temporada fría del año, que proporcionan diversas ventajas a la conducción.

Debes tener claras las claves para comprar neumáticos de invierno y mejor así de manera notable la seguridad cuando conduzcas en todos días fríos del año; donde abundan la nieve y las lluvias en gran parte de la península.

El neumático de invierno lleva el indicativo M+S que lo diferencia de cualquier otro tipo de neumático. M+S quiere decir Mud y Snow, es decir, barro y nieve en inglés. Además, también incorporan un símbolo de una montaña con tres picos y un copo de nieve.

La gran ventaja y diferencia de los neumáticos de invierno es que no se endurecen cuando la temperatura desciende por debajo de los 7º. Esto se traduce en una mayor flexibilidad y mejor agarre a la calzada con esta situación meteorológica.

¿Qué tener en cuenta antes de comprar neumáticos de invierno?

Es importante tener en cuenta el diseño del dibujo de los neumáticos de invierno. Las láminas y aristas en su superficie propician el conocido “efecto oruga” en la nieve. Gracias a estos elementos en la superficie de la rueda que conlleva un mejor agarre, lo que se origina son pellizcos sobre la superficie helada o la nieve. El dibujo de los neumáticos de invierno normalmente se prolonga hacia los laterales y los canales de evacuación son más anchos; ayudando a mejorar la seguridad en la conducción en condiciones de lluvia o nieve. Aunque esta es una cualidad muy importante para asegurar una buena conducción en condiciones de invierno y proporcionar una buena adherencia, debes estar atento a ello; ya que no todos los neumáticos M+S alargan su dibujo hasta el lateral.
Los neumáticos de invierno aportan un agarre extra a la calzada. La composición de la goma de los neumáticos favorece a que no haya pérdidas de adherencia cuando la carretera está mojada o la temperatura es muy baja. Además, este tipo de ruedas son capaces de acortar la distancia de frenado respecto a los neumáticos tradicionales bajo las condiciones de invierno.
Aunque es recomendable cambiar los neumáticos para las épocas de más calor, estos neumáticos de invierno se pueden utilizar durante el periodo de verano. Son capaces de soportar mucho mejor las altas temperaturas, de tal manera que el desgaste no será excesivo en la conducción con altas temperaturas en el ambiente.
La utilización de este tipo de neumático conlleva el ahorro a la hora de tener que utilizar cadenas para la nieve. ¿Qué queremos decir con esto? Que, gracias a su composición y diseño, contribuyen a la ventaja de evitar la colocación de cadenas ante una gran nevada. Mucha gente no sabe ponerlas bien y pueden provocar una avería o accidente, por lo que además de evitar este tipo de situación, podrás ahorrar en la compra de cadenas.

Estas son algunas de las razones por las que deberías utilizar unos neumáticos adecuados para el periodo de la estación de invierno. Si estás pensando en cambiar de ruedas y comprar neumáticos de invierno para tu vehículo, no dudes pedir asesoramiento en tu taller Bestdrive más cercano. Prepárate para el invierno con neumáticos Continental, en Bestdrive estaremos encantados de atenderte.

Mantenimiento de coches eléctricos, ¿qué necesitas saber?

El sector de la automoción está cambiando por completo con la llegada a los hogares españoles de los vehículos eléctricos. Algo que está suponiendo grandes transformaciones en los hábitos de las personas a la hora de conducir, que ya comienzan a adaptarse a las peculiaridades de los modelos eléctricos. Nueva fórmula de repostaje, funcionamiento diferente con respecto a los coches diésel o gasolina, menos restricciones a la hora de circular… Pero, al igual que en los tradicionales, el mantenimiento es fundamental para garantizar su estado óptimo. ¿Te gustaría conocer todos los detalles sobre el mantenimiento de coches eléctricos? ¡No te pierdas este post!

Características del mantenimiento de coches eléctricos

Si has llegado hasta esta información es porque tienes un vehículo eléctrico y te gustaría conocer más detalles sobre cómo se debería realizar su mantenimiento o bien, estás pensando en adquirir uno y quieres saber qué necesidades plantea en este ámbito. No te preocupes, porque te vamos a dar todos los detalles, ya que sabemos que comprar un eléctrico te lleva a un mundo de dudas y de preguntas que quieres responder cuanto antes.

En primer lugar, tienes que tener en cuenta que el funcionamiento de un coche eléctrico es completamente diferente al de un coche diésel o gasolina. Y eso en buena medida, es lo que establece los principales cambios. Según algunos estudios, el mantenimiento de coches eléctricos llega a resultar entre un 40 y un 55% más barato. Esto se debe primordialmente a que los coches eléctricos disponen de hasta un 60% menos de piezas y componentes. Así, en los vehículos eléctricos desaparecen elementos como la correa de distribución, filtros como el de carburante y aceite; y aceites como el de motor o carburante. Al no existir, no tendremos que preocuparnos por su mantenimiento y dejaremos de destinar dinero a este apartado.

Por otro lado, podemos afirmar que el mantenimiento de los coches eléctricos es bastante más sencillo y esto hace que tengan visitar menos los talleres mecánicos. Pero sí debemos tener en cuenta que seguirán existiendo elementos que sí necesiten una revisión de estado y a los que no debemos dejar de prestar atención.

Qué tener en cuenta en el mantenimiento de coches eléctricos

Al igual que los coches diésel o gasolina, los eléctricos también requieren de un mantenimiento periódico en determinados elementos. Así, aunque los modelos electrificados cuentan con componentes diferentes que no incluyen los no eléctricos, también tienen elementos comunes que deben ser revisados. Algunos varían en periodicidad y otros, siguen las pautas habituales. ¿Quieres saber cuáles son los elementos que sí están incluidos en el mantenimiento de vehículos eléctricos?

Neumáticos. Aunque el tamaño de las llantas está bastante relacionado con la eficiencia energética de los modelos eléctricos, la banda de rodadura no varía. Así, aunque se trabaja en el desarrollo de neumáticos especiales para coches de este tipo como es el caso de Conti.eContact (primer neumático completamente adaptado a las necesidades de los vehículos eléctricos); la gran mayoría de los modelos no montan neumáticos especiales. En ese sentido, la normativa general también afecta a estos modelos. Así, se establece que la profundidad del dibujo mínima legal es de 1,6 mm para poder circular.
Filtro del habitáculo. Como te hemos comentado, los coches eléctricos no disponen de filtros como el del aceite o carburante. Pero sí mantienen el filtro del habitáculo, que se recomienda cambiar a los 1.000 kilómetros o anualmente.
Frenos. Los vehículos eléctricos suelen contar con una mayor duración de las pastillas de freno ya que sufren menor desgaste, al contar con un sistema de frenada regenerativa. Esto no quiere decir que no necesiten una sustitución, algo que se recomienda realizar entre los 40 y 50 mil kilómetros recorridos.
Batería. Sin duda, es el gran elemento diferenciador entre ambas tipologías de coches. La batería de los coches eléctricos es fundamental para su funcionamiento ya que es el elemento encargado de almacenar la energía que se traduce en el movimiento del vehículo. Por tanto, no es de extrañar que sea el componente al que mayor atención debamos prestar y el que mayor desgaste sufre. Actualmente, hay algunos fabricantes que garantizan una autonomía de hasta ocho años y para el caso de las baterías de iones de litios, de un máximo de 15 años. Llegados a los períodos de duración de vida útil, será necesario proceder a la sustitución.

Además de todos estos elementos, indudablemente tendrás que seguir teniendo en cuenta otros aspectos como la carrocería del vehículo, parabrisas, escobillas, etc. Algo que no varía respecto a los coches no eléctricos y para los que nos regiremos por las recomendaciones habituales de los especialistas en mecánica.
Esperamos que este post te ayude a aclarar todas las dudas sobre el mantenimiento de coches eléctricos. Y recuerda que en tu taller BestDrive más cercano, podrás llevar a cabo todo el mantenimiento del nuevo coche eléctrico y contarás con el asesoramiento personalizado de nuestros especialistas, que te ayudarán a solventar todas las posibles dudas sobre el tema.

10 motivos por los que podrían inmovilizar tu coche

En verano están previstos millones de desplazamientos por las carreteras de nuestro país. Si tú también vas a viajar, te interesa conocer los motivos por los que tu coche podría ser inmovilizado. Solo tienes que tomar nota y no cometer ninguno de estos errores, para disfrutar de unas vacaciones tranquilas junto a tu vehículo.

Playa, montaña, parajes naturales…Seguro que tienes muchos planes y rutas para este verano. Pero, ¡cuidado! Estas infracciones podrían podrían ser la causa de encontrar tu coche inmovilizado.

1. Conducir bajo los efectos de drogas o alcohol. Se trata de uno de los motivos principales. Si el conductor da positivo en las pruebas de alcohol o drogas y ningún acompañante está en condiciones, o se niega a realizar las pruebas, podrá sufrir la inmovilización inmediata del vehículo.

2. No disponer de autorización administrativa para circular. Es decir, no tener el permiso de circulación o tenerlo fuera de vigor.

3. Carecer del seguro obligatorio. Este es uno de los principales motivos que supone la inmovilización inmediata del vehículo, ya que se trata de una norma establecida por la Ley sobre Responsabilidad Civil y Seguro en la Circulación de Vehículos a Motor, de obligado cumplimiento para todos los conductores.

4. El vehículo supone un riesgo para la circulación. Si el coche presenta deficiencias o anomalías, puede ser inmovilizado. Especialmente, si suponen un riesgo para el resto de los conductores. Por ejemplo, circular sin frenos, luces o ITV pasada.

5. Respecto a las emisiones, el coche podría ser inmovilizado en caso de que supere los niveles de gases, humos y ruidos permitidos reglamentariamente, en función del vehículo en concreto.

6. Si el coche cuenta con elementos o sistemas encaminados a eludir la vigilancia de los agentes de Tráfico y de los medios de control a través de captación de imágenes (inhibidores o detectores de radares), podrá ser inmovilizado con motivo suficiente.

7. En caso de existir razones para pensar que se han manipulado los instrumentos de control del vehículo como limitadores de velocidad o tacógrafo.

8. Vehículo con exceso de carga. Según la DGT, es un motivo para la inmovilización del vehículo circular “cuando exista una ocupación excesiva: más del 50% del número de plazas autorizadas, excluida la del conductor; es decir, si en un turismo habilitado para 5 plazas viajan 8 o más”.

9. No llevar silla infantil y viajar con niños en el coche.

10. Circular sin haber descansado el tiempo establecido en el Reglamento General de Circulación. Esto es especialmente importante en el sector de los profesionales dedicados al transporte por carretera.

Ahora que ya conoces los principales motivos por los que tu coche podría ser inmovilizado, apúntalos y sal a la carretera respetando siempre las medidas establecidas por la ley. Evitarás pasar por el mal trago de tener tu coche inmovilizado y que tus vacaciones no sean lo que esperabas. Y recuerda que puedes comprobar todo lo que necesitas antes de salir de viaje, en nuestros talleres. ¡Pide cita y conduce sin preocupaciones!

Claves para los neumáticos en verano

Ahora que estrenamos la nueva época estival, es importante tener en cuenta una serie de puntos clave de tus neumáticos en verano, para que estén en perfectas condiciones.

El verano es una de las estaciones del año en la que más desplazamientos se producen por carretera como consecuencia de las vacaciones. Por eso, si vas a viajar, es fundamental tener tu vehículo preparado y prestar una atención especial a tus neumáticos.

¿Por qué sufren los neumáticos en verano?

Los neumáticos hay que cuidarlos durante todo el año. Pero es especialmente importante hacerlo durante el verano, ya que se ven expuestos a condiciones más duras.

El asfalto alcanza temperaturas muy elevadas y esto hace que la rueda se abrase y desgaste de forma más rápida.
También influye la localización geográfica en la que vivamos. El sur es especialmente exigente, ya que las temperaturas suelen ser las más elevadas del país.

Consejos para neumáticos en verano.

1. Monta neumáticos de verano.
La mejor opción para circular seguro con tu coche es realizar el cambio a neumáticos especiales para el verano, ya que son los más óptimos en las nuevas condiciones de la carretera.
Se trata de neumáticos especialmente diseñados para el verano y que algunos fabricantes ponen a disposición de sus clientes con el objetivo de facilitar un perfecto rendimiento en cuanto a tracción, frenada y maniobrabilidad; aspectos fundamentales para la seguridad del vehículo.
Como grandes ejemplos de neumáticos de verano tenemos el ContiSportContact™ 5 P, SportContact 6, ContiEcoContact™ 5 o PremiumContact™ 6; entre otros.

2. Elige correctamente tus neumáticos.
Recuerda que si vas a montar tus neumáticos en verano, no solo cuenta el cambio. Tendrás que elegir unos neumáticos acordes al modelo de tu coche. Para ello, puedes usar herramientas como esta (link buscador neumáticos BestDrive), que te facilitarán la tarea de conocer el neumático que necesitas.

3. Revisa el estado del neumático
Hayas cambiado o no tus neumáticos en verano, si vas a viajar y sobre todo si es un desplazamiento largo, conviene revisar el estado del neumático y ver si presentan algún problema como roturas, grietas, etc.
Además, hay que prestar una especial atención al dibujo del neumático que es clave para conocer el estado de desgaste. Recuerda que la profundidad mínima establecida por ley es de 1,6 mm.

4. Examina la presión del neumático
La presión del neumático es muy importante para que rinda de forma correcta durante el verano. Cada fabricante establece la presión más adecuada en el manual de usuario del vehículo. Por tanto, hay que comprobar esto y asegurarnos de que la presión de inflado es la recomendada por el fabricante.
No olvides que para comprobar la presión, se debe hacer siempre cuando los neumáticos estén fríos. Y si tienes dudas, siempre puedes acudir a tu experto BestDrive más cercano y realizar esta comprobación.

5. No sobrecargues de peso tu coche
Como es frecuente, verano es época de vacaciones y de realizar viajes en familia o con los amigos donde queremos llevarnos “la casa a cuesta”. Así que, ¡ojo! El sobrepeso puede provocar daños en tus neumáticos, acortando incluso su vida útil y afectando negativamente a la seguridad del vehículo.

Finalmente,nuestra mayor recomendación para los neumáticos en verano es que visites tu centro especialista más cercano y realices todas las comprobaciones pertinentes junto a un experto. ¡Ya puedes pedir tu cita en talleres BestDrive!

Neumáticos de verano, cuidados básicos.

El cuidado de los neumáticos de verano es importante debido a la gran cantidad de desplazamientos por carretera que se producen en esta época. El buen tiempo, los días largos y las vacaciones estivales invitan a salir y viajar, cosa que se hace a gran escala en las operaciones de salida y retorno. Es también una época exigente con los neumáticos: a causa del calor, los pavimentos resultan ser más abrasivos y en consecuencia los neumáticos sufren una degradación mayor. ¿Quieres conocer unos consejos básicos para el cuidado de tus neumáticos de verano?

Adquiere neumáticos de verano

Algunos fabricantes ofrecen neumáticos de verano, diseñados específicamente para ofrecer un rendimiento óptimo sobre el árido asfalto y las altas temperaturas. Al hablar de rendimiento, nos referimos a la influencia de los neumáticos en la tracción, frenada y maniobrabilidad; aspectos fundamentales para la seguridad del vehículo. Por tanto, usar neumáticos de verano que aporten el mayor rendimiento durante las condiciones extremas, es de gran importancia. Según la región en la que vivas puedes utilizar este tipo de neumático durante todo el año, solo debes saber que, al ser diseñados específicamente para el verano, sus prestaciones suelen ser inferiores en temperaturas por debajo de los 7ºC.

Usa la presión de inflado adecuada para los neumáticos

Los neumáticos de verano también deben usar la presión recomendada por el fabricante del vehículo, que suele indicarse en el manual de instrucciones o en determinados lugares del automóvil (podría estar, por ejemplo, en la tapa del depósito de combustible). Si la presión fuera menor, el consumo de combustible será mayor pero además corres el riesgo de sufrir daños en los flancos del neumático, así como un sobrecalentamiento del mismo que podría deteriorarlo. Si la presión fuera mayor, el desgaste de los neumáticos será mas importante, y el confort de conducción resultará menor.

Para comprobar la presión, los neumáticos deben estar fríos. Si compruebas la presión inmediatamente después de haberlos usado, probablemente obtendrás valores superiores a la presión real, ya que ésta aumenta debido al calentamiento del neumático. Si estás obligado a comprobar la presión en caliente, te aconsejamos de igualar la presión de los 4 neumáticos a la presión del neumático que tenga el valor de presión más alto. Sin embargo, es importante repetir esta operación en frío y ajustar la presión a los valores recomendados por el fabricante.

Recuerda, disfruta de tus neumáticos de verano y vive tus vacaciones de la mejor manera con BestDrive

Viajar en coche, consejos para comprar una silla infantil.

La seguridad de los niños es uno de los aspectos más importantes a la hora de realizar un trayecto en coche. En este sentido, es fundamental contar con los medios necesarios para viajar de forma correcta. Y aquí, las sillas infantiles constituyen uno de los elementos claves. Pero hoy nos planteamos, ¿cómo de seguras son?

El RACE acaba de publicar el primer informe europeo sobre seguridad en sillas infantiles, en el que se evalúan 42 tipos diferentes. El análisis de estos sistemas de retención para niños se ha realizado en condiciones más exigentes que las habituales pruebas de homologación y teniendo en cuenta factores como seguridad, ergonomía y comodidad para el niño, manejo o presencia de sustancias peligrosas en los tejidos. Además, se han realizado pruebas de impacto frontal a través de nuevos dummies y sensores; con el objetivo de facilitar la identificación de lesiones.

Este endurecimiento de los criterios de análisis, ha permitido la obtención de nuevos resultados que tienen en cuenta la normativa I-Size ECE 129 y las condiciones establecidas por EuroNCAP.

Así, 24 de los modelos examinados han pasado la prueba con una nota satisfactoria y 13 con una calificación de aceptables. Se trata de sistemas de retención infantil con homologación ECE R-129 (i-Size), donde solo uno, no ha pasado los niveles de recomendación debido a la presencia de sustancias tóxicas en el tejido. Estos modelos I-Size han demostrado un avance en la seguridad y una mayor protección frente a posibles impactos laterales.

En cuanto a la parte baja de la clasificación, ocho sillas no han logrado pasar los requisitos mínimos de calidad que se exigían en el estudio, obteniendo resultados de “insatisfactorios” o “muy insatisfactorios”.

Por tanto, el informe RACE ha situado a las sillas infantiles con homologación I-Size como las grandes triunfadoras en materia de seguridad.
Ahora bien, ¿qué recomendaciones se deben tener en cuenta a la hora de comprar una silla infantil?

Verificar que el coche se encuentra homologado y adaptado para el uso de sillas infantiles.
Recopilar información sobre la oferta existente en el mercado, comprobando el listado de vehículos con los que son compatibles.
Buscar un modelo que se adapte a la altura del niño, sin dejar de lado el sentido de la marcha.
Comprobar las facilidades de la silla en cuanto a manejo. Es decir, que pueda instalarse fácilmente en los anclajes Isofix o mediante fijación en los cinturones de seguridad del vehículo.
Asegurar que la silla cumple con la normativa existente en materia de sustancias contaminantes.

No dejes de lado estos consejos para comprar una silla infantil y haz que los peques viajen de forma segura en el coche. ¡Disfruta del camino con seguridad!

Cómo conducir por una zona inundada (si realmente tienes que hacerlo)

Con la llegada de las fuertes lluvias a lo largo de todo el país y los riesgos que ellas conllevan, todas nuestras miradas están puestas en la situación que actualmente presentan las carreteras de toda España. Y es que la lluvia puede provocar efectos sobre el asfalto volviéndolo más deslizante y en caso extremos, dejando charcos, corrientes de agua provocadas por la mezcla de viento y lluvia e incluso con hielo.

Por todo ello, el mejor consejo que se puede dar a un conductor es mantenerse fuera de la carretera durante el mayor tiempo posible. Pero, ¿qué pasa si necesitas conducir por una urgencia o para ir al trabajo y debes cruzar una zona inundada?

Evidentemente, lo primero en lo que pensamos es en encontrar una ruta alternativa. Otro camino por el que poder continuar hasta nuestro destino, sin necesidad de atravesar la zona inundada.

Sin embargo, podría suceder que fuera la única vía por la que podemos llegar hasta un determinado punto y por eso, tengamos que conducir en zona inundada. En ese caso, la situación comienza a complicarse y es importante, tener en cuenta estas recomendaciones, a la hora de pasar con tu coche por un lugar que se encuentre anegado por el agua.

Actualmente, los coches se encuentran fabricados para ser capaces de soportar las condiciones climatológicas más extremas. Pero pueden llegar a ser muy vulnerables frente al agua ya que tanto su sistema eléctrico como mecánico, son particularmente sensibles a los daños provocados por el agua. Además, hay que añadir el riesgo que supone la fuerza de la corriente que puede llegar incluso a arrastrar el vehículo.

Dicho esto, ¿qué deberíamos hacer en caso de tener que conducir en zona inundada?

Lo primero que te recomendamos es observar el nivel de profundidad del charco en cuestión. Para ello, ve introduciendo suavemente las ruedas delanteras y observando; manteniendo el motor revolucionado para evitar que el agua entre en el tubo de escape. Una vez hecho esto, trata de buscar la zona menos profunda para cruzar por ahí.

Además, deberías eludir la tentación de tratar de salir lo antes posible, ya que la velocidad puede empujar el agua hasta el motor.Mantente en primera marcha y con el embrague pisado una vez que hayas entrado, para atravesar la zona.

Algunos expertos han probado técnicas para encontrar una solución en caso de producirse esta situación y que consisten en entrar al agua suavemente para después acelerar fuertemente, provocando una ola delante del vehículo que mantendría el agua alejada del motor y el conducto del aire despejado. Sin embargo, esta técnica no siempre funciona, sobre todo con vehículos más antiguos.

Una vez que salgas del agua, es muy recomendable secar los frenos del vehículo usándolos cuidadosamente y de manera gradual; así como el radiador para eliminar una posible obstrucción.

Finalmente, si no estás seguro de que tu coche pueda estar completamente intacto, déjalo en manos de nuestros expertos. Localiza tu taller BestDrive más cercano y ven a comprobar el estado de tu coche. Te daremos consejos para que puedas seguir disfrutando con seguridad. Esperamos que estos consejos para conducir en zona inundada, te sirvan de ayuda.

Cómo desempañar el parabrisas del coche de forma correcta

Desempañar el parabrisas del coche es una problemática diaria que nos solemos encontrar durante el invierno, ya que muchos vehículos pasan la noche a la intemperie. No hacerlo de una forma correcta, puede afectar directamente a la visión durante el ejercicio de la conducción y por tanto, provocar el incumplimiento de la normativa de circulación, haciendo que aumente el riesgo al volante.

La causa de que el parabrisas de tu coche se empañe, se produce por la diferencia de temperatura entre el aire interior y exterior. Dentro, el cristal está frío porque está en contacto con el exterior y por lo tanto, el aire disminuye su temperatura, liberando el exceso de vapor en forma de condensación y formando el empañamiento.

Hoy, te contamos algunas claves que te ayudarán a desempañar el parabrisas del coche adecuadamente:

1. Usar la climatización y el aire acondicionado de forma correcta. Para ello, se deberá emplear en primer lugar el aire caliente para compensar el frío del exterior. Se recomienda activar la calefacción y el ventilador al máximo. Además, asegúrate de que las rejas se encuentran colocadas en dirección al parabrisas y los cristales, ya que el aire caliente los secará.
2. No usar la recirculación. Si bien en verano se aconseja para el vaho, en este caso es contraproducente al no permitir una ventilación adecuada.
3. Buscar el balance térmico en el habitáculo. Se trata de alcanzar la temperatura y humedad cómoda para la conducción, pero sin dejar que se empañen los cristales. Lo normal es que se sitúe entre los 18 o 19 grados.
4. Antes de comenzar a conducir, espera un tiempo prudencial, sobre todo si lo vas a hacer a primera hora de la mañana, para que el motor se empiece a calentar. Así, conseguirás que el parabrisas alcance una temperatura adecuada, gracias a la calefacción y no tendrás problemas de visión.
5. No frotar los cristales con un paño o papel. Una acción nada recomendable que además, remueve el polvo acumulado en el cristal y deja marcas de suciedad.

Es importante que tomes nota de estos consejos sobre cómo desempañar el parabrisas del coche, para que nada te impida salir de forma correcta a la carretera.

Y recuerda, si tienes dudas sigue siempre las recomendaciones de tu taller mecánico BestDrive de confianza. Nuestros profesionales te darán los mejores consejos para que practiques una conducción segura y sin riesgos.

Neumáticos de invierno y otros aliados el frío

Aunque ha tardado en llegar, el frío ya está aquí y para combatirlo con tu coche necesitarás conocer una serie de trucos como usar neumáticos para el invierno. Hemos preparado un listado de consejos y grandes aliados para sobrevivir al frío.

Almohadillas en la nieve

¿Necesitas salir de tu garaje y está lleno de nieve o hielo?¿tu coche se ha salido de la calzada y se ha quedado en una zona con hielo o nieve? Para estos casos y durante todo el invierno recomendamos llevar en el coche una almohadilla de goma para garantizar un mayor agarre.

El proceso es muy fácil, si las ruedas del coche patinan, encajaremos la almohadilla para que el neumático tenga una superficie sobre la que rodar sin problemas. Nunca pensamos que nos vamos a quedar tirados con el coche pero cuando nos pasa, mejor estar prevenidos.

Este proceso puede que no sea necesario en caso de usar neumáticos para el invierno, ya que aportan un agarre mucho mayor que los de verano.

Un mechero para las llaves

Es posible que al llegar al coche la cerradura esté congelada, ante esta situación podemos aplicar un sencillo truco: calentar la llave con un mechero y será la propia llave la que derrita el hielo al entrar en contacto con él.

Otro truco para cerraduras congeladas es usar alcohol, spray anticongelante o aplicar un poco de loción para manos, de las que llevan alcohol. Es importante acordarse de bajar de casa con alguno de estos elementos.

Utilizar el freno con cabeza

Puede que a muchos se les olvide pero, con las bajas temperaturas y el asfalto húmedo o incluso con pequeñas placas, el coche tarda mucho más en frenar.

Esto significa que debemos conducir con una precaución extra y, en caso de ser necesario, empezar a frenar antes que cuando lo hacemos con temperaturas más altas porque la distancia de frenado aumenta en situaciones invernales.

Sirve como ejemplo el gráfico de la DGT donde se ve que en invierno la distancia de frenado puede ser de hasta 200 metros de distancia.

Descongelar el hielo de las lunas

Si un coche duerme en la calle, es muy habitual que a primera hora de la mañana lo podamos encontrar con unas importantes placas de hielo. Esto hace que debamos actuar con cabeza y conviene saber qué es lo que debemos hacer.

Antes de nada, aclaramos que NO se debe echar agua caliente sobre el hielo ya que el cristal se puede quebrar por el fuerte cambio de temperatura. Tampoco se debe usar sal porque puede dejar arañazos y ser corrosivo para la pintura.

Para quitar el hielo correctamente se puede usar alcohol, líquido refrigerante o agua salada. No hay que olvidar que conviene quitar la capa de nieve más grande con una rasqueta o con una tarjeta que no usemos.

También se puede descongelar el hielo poniendo la calefacción sobre el cristal y esperando a que se vaya deshaciendo.

Neumáticos para el invierno y presión de los neumáticos

Los neumáticos para el invierno están diseñados específicamente para ser mucho más efectivos con temperaturas por debajo de los 7º. El agarre que aporta un neumático de invierno es muchísimo mayor que el de uno de verano, además de reducir la distancia de frenado y mantener la carcasa en buen estado.

No hay que olvidar que si montamos neumáticos para el invierno, sirven de sustitutivo legal frente a las cadenas. También es importante saber que, en invierno, las presiones de los neumáticos son diferentes al resto de estaciones.

Kit de supervivencia

Puede parecer una opción remota pero nunca es imposible. Una fuerte nevada, un accidente en cadena o salirnos de la calzada pueden ser situaciones que nos obliguen a estar en el coche unas horas. Hay que estar prevenidos por si eso pasa teniendo en el coche estos objetos:

– Batería portátil: Puede que el móvil no tenga suficiente batería, un cargador externo lo solucionará o un cargador de coche, si se encuentra en perfecto estado claro.

– Pinzas: Otros conductores pueden socorrernos con este simple objeto que puede devolverle la vida a nuestra batería.

– Linterna: Nunca sabes cuántas horas puedes estar en el coche ni si puedes sufrir un incidente de noche.

– Manta y ropa abrigada: Si el coche no funciona o tenemos que abandonarlo por unos momentos, para cambiar una rueda por ejemplo, conviene estar bien abrigado.

– Snacks no perecederos: Tener algunas barritas energéticas o algo de picar no perecedero a corto plazo puede salvarnos de algún susto.

Es importante también no apurar mucho la gasolina del coche porque, si estamos tirados y se acaba la gasolina… ¡se acabó la calefacción!

7 trucos para tu coche que debes conocer

Unos consejos para tu coche pueden hacer mucho más sencillo el día a día como conductor, por esa razón hemos preparado un listado con unos trucos que todo conductor debe saber.

Recuerda dónde aparcaste el coche

Es muy normal aparcar después de un día largo o, incluso en un día normal, y que no recordemos donde hemos aparcado.

Se puede perder un momento pensando dónde dejamos el coche la última vez o también poner solución de dos formas:

Poner un mapa de tu zona en la nevera con un imán. Cada vez que llegues a casa después de aparcar, deja el imán en el sitio en el que has dejado tu coche. Así cuando vayas a cogerlo, solo tienes que mirar el mapa y no sufrir problemas de memoría.

Tener alguna app de aparcamiento que nos recuerde la ubicación exacta, como la que os comentamos en nuestro artículo de apps para tu coche.

¿En qué lado tengo la tapa de la gasolina?

Nos metemos en una gasolinera y, es cierto que echamos gasolina habitualmente pero, de pronto, no sabemos en que lado del coche tenemos el depósito de gasolina.

Un truco que pocos saben es que hay una solución para esta situación en algunos coches. Se trata de un pequeño triangulito que hay en el cuadro de mandos junto con el símbolo de gasolina. Hacia el lado que apunte el triángulo es donde está la tapa de la gasolina.

Para los modelos que no tengan este triángulo, en muchos casos sabremos donde está la tapa porque se encuentra en el lado inverso al que está ubicada la manguera en el dibujo.

Mantén tu coche limpio

¿Cuántas veces hemos ido de viaje o nos hemos desplazado y no hemos sabido dónde dejar algún envoltorio, papel de publicidad o pañuelo?

Esto tiene una solución muy sencilla que pasa por tener una pequeña papelera en el coche en el que se puede poner una bolsa (recomendamos llevar algunas en el maletero para ir reponiendo).

De esta manera no habrá papeles inútiles por el suelo ni tampoco en el hueco entre ambos asientos.

No aparques tu coche de oído

A la hora de aparcar en una plaza privada nuestro coche, es posible que no calculemos bien el espacio que queda hasta la pared o incluso el hueco para poder abrir el maletero cómodamente.

Esto tiene una solución fácil conocida por algunos pero no por todos: colocar una pelota de tenis u objeto que pende del techo. Este objeto estará colocado en el punto exacto en el que queremos frenar y, cuando toque el cristal sabremos que debemos parar.

Si os vais a poner manos a la obra para colocarla, tened en cuenta que la distancia deberá medirse para el lado que queramos aparcar el coche, no será la misma distancia si aparcamos hacia delante que hacia atrás.

Aprovecha el sol

Asegúrate de aparcar, si es posible, con el coche mirando hacia el este. De esta manera conseguiremos que los primeros rayos de sol “caigan” sobre nuestra luna delantera o sobre el vehículo entero.

Esto nos servirá para calentar algo el habitáculo pero, sobre todo, para ayudar al descongelado de las lunas en las frías mañanas.

Facilita la salida de tu coche

El frío hace que los neumáticos se endurezcan y también el suelo puede estar más resbaladizo haciendo que nos cueste más salir de nuestro parking.

Esta situación se hace más complicada aún si dejamos el coche en un sitio en el que pueda nevar. Por eso la solución más práctica para ganar agarre y salir fácilmente es colocar junto a las ruedas una alfombrilla de coche.

Esto hará que la salida sea mucho más sencilla, aunque, como ya os comentamos, esta situación se minimiza con un neumático de invierno.

Ahorra gasolina pensando con la cabeza

Aunque parece algo lógico, puede pasar que si no lo pensamos se nos pase por alto una importante premisa. Cuanto más peso tenga un coche, más alto será su consumo de gasolina.

Habiendo razonado este punto, no hace falta decir que no hay que usar el coche como almacén ni tampoco llevar cargas absurdas que no utilizamos como un cofre vacío.

No olvides que también es importante saber cómo organizar el maletero de tu coche.

¿Por qué se recomienda montar neumáticos de invierno?

En cuestión de seguridad, un neumático de invierno es uno de los elementos clave cuando las temperaturas son muy bajas, algo que os vamos a explicar en este artículo. También os vamos a aclarar si es necesario usar cadenas de nieve con neumáticos de invierno y si cambia la presión de estos neumáticos respecto a los de verano. Es importante saber, la respuesta de un neumático de verano no es la misma que la de un neumático de invierno como tampoco lo es la presión de los neumáticos recomendada para los mismos.

¿Qué beneficios tiene montar un neumático de invierno?

Si cogemos un neumático de invierno y uno de verano podemos comprobar que el dibujo de su banda de rodadura es muy diferente principalmente porque el de invierno debe responder ante situaciones con nieve o posible hielo. El de invierno tiene una laminillas y los surcos circunferenciales más estrechos y profundos, tal y como se puede ver en la imagen.

El neumático de invierno se debe montar siempre que las temperaturas sean inferiores a los 7 grados centígrados, porque uno de verano no responde eficientemente en esas condiciones. Es importante saber que, a diferencia de lo que muchos piensan, un neumático de invierno no solo es útil para usar con nieve, también lo es para circunstancias normales o lluviosas siempre que las temperaturas sean extremas.

En los países nórdicos o en Alemania, su uso es obligatorio ya que se ha demostrado que son mucho más seguros que los de verano en los meses fríos, por lo que en España debería usarse en los meses de noviembre a abril, variando siempre según la provincia en la que nos encontremos.

También debemos destacar que la estructura o composición de un neumático de invierno está pensada para que no se endurezca con el frío, algo que pasa con los de verano, y al mismo tiempo ofrece el máximo rendimiento respecto a:

Adherencia: El agarre sobre el asfalto es muy elevado, sin perder prestaciones con frío extremo o nieve
Frenada: Reduciendo la distancia en condiciones invernales
Tracción: Es más sencillo iniciar el movimiento con un neumático de invierno

Si necesitas montar neumáticos de invierno en Madrid o en cualquier otra provincia, puedes pedir cita previa o presupuesto directamente en nuestra web y empezar a disfrutar de la máxima seguridad.

Si uso neumático de invierno, ¿debo usar cadenas de nieve?

Por último, otro de los grandes beneficios que tiene un neumático de invierno y que los conductores valoran mucho, es que sirven como sustitutos de las cadenas de nieve, o lo que es lo mismo, están homologados para ser usados sin cadenas gracias a su alto agarre. Estos neumáticos son incluso más eficientes que montar un neumático de verano con cadenas ya que evitan la presión de las cadenas sobre los neumáticos.

Hay que recordar que el precio de un neumático de invierno, con modelos para turismo y neumáticos 4×4, apenas cambia respecto a los de verano, por lo que no recomendamos en ningún caso usar “ruedas baratas” ni tampoco neumáticos de segunda mano, algo que no recomendamos en ningún caso ni para neumáticos para invierno ni de verano porque unos euros no son suficientes para ahorrar en seguridad y jugarse la vida.

Presión de neumáticos de invierno, es la misma que la de los neumáticos de verano?

La presión de los neumáticos es un elemento clave para la seguridad y se debe revisar una vez al mes pero, ¿cambia esta premisa en invierno? La respuesta es afirmativa porque con temperaturas muy bajas, los neumáticos puedes perder presión con más facilidad.

Esto hace que la revisión de la presión de los neumáticos de invierno deba ser cada 15 días y el inflado debe sobrepasar en 0,2 bares la presión recomendada por el fabricante. No olvides que, en nuestra web, puedes consultar la presión recomendada de los neumáticos por marcas.

No hay olvidar que, pasados los meses fríos, el nivel de inflado deberá volver al recomendado por el fabricante. Recomendamos esta práctica guía para saber cómo medir la presión de los neumáticos.

¡6 malos hábitos en el coche que seguro que haces!

Cuando conducimos seguramente cometemos varios errores ya sea por malos hábitos adquiridos o por desconocimiento. Hemos elaborado un breve listado con algunos de estos malos hábitos al conducir que, ¡estamos seguros de que al menos uno lo cumples!

1. Pasar los badenes con dos ruedas

Cuando nos encontramos ante un badén o resalto en la carretera, hay muchos casos en los que alguno de los paneles que lo componen está levantado y, ¿qué hacen muchos conductores? Sí, tratan de esquivarlo pasando dos ruedas por encima del badén y otras dos por el asfalto.

Esto es un error que afecta a nuestro coche porque, aunque parece que estamos restando un impacto sobre el coche, lo que en realidad estamos haciendo como ya os contamos, es un desequilibrio en el anclaje de la suspensión ya que sólo se eleva un muelle y un amortiguador, lo que puede repercutir en daños futuros en la suspensión que podemos evitar.

2. Soltar el volante para gesticular

A veces vamos conduciendo con un acompañante y de pronto sentimos la imperiosa necesidad de reforzar nuestra conversación con algún gesto o aspaviento pero, ¿cuál es el problema? Que muchas veces al hacerlo soltamos el volante.

Esto puede hacer que por ejemplo vayamos a tomar una curva y, como estamos gesticulando, volvemos a coger rápido el volante haciendo un giro brusco. Hay casos en los que directamente se puede tener un accidente por falta de tiempo de reacción o por un volantazo que nos lleve con fuerza fuerza de la vía.

3. Cabrearnos y acelerar

No es difícil tampoco que nuestra reacción a un cabreo sea acelerar de forma desmedida sin pensar en las consecuencias que puede tener. Una discusión acalorada con algún pasajero del coche o un cabreo con algún otro coche en la carretera puede provocar esta situación. Mucho cuidado con estas situaciones porque pueden desencadenar en un accidente.

Añadimos que también a muchos conductores les pasa algo parecido pero a la inversa. Cuando están a gusto hablando de manera distendida, tienden a levantar el pie del acelerador reduciendo la velocidad, lo que puede resultar molesto para el resto de usuarios o incluso suponer un riesgo por ir a una velocidad muy inferior a la resto.

Cuidado con encenderse al volante, sea para dar énfasis en una conversación casual o también en una discusión.

4. Coger algo de la guantera

Subimos al coche, empezamos a conducir y de pronto la luz nos deslumbra y, no se nos ocurre nada mejor que coger las gafas que las tenemos a buen recaudo en la guantera.

¿Esto que provoca? Que dejamos de prestar atención a la carretera para estirarnos al máximo y llegar hasta la lejana guantera. Mientras hacemos esto, estamos dejando de ver la carretera y el volante lo estamos cogiendo con muy poco margen de maniobra.

Este caso vale para las gafas, los pañuelos o incluso un CD de música. La solución a este problema es: parar y coger lo que queremos, dejar los objetos guardados más cerca del asiento del conductor o directamente aguantarnos hasta que lleguemos a nuestro destino.

5. Dejar objetos en el salpicadero

Llegamos al coche con las manos llenas de cosas y, así sin pensarlo, decidimos dejarlo todo por donde se pueda lo que incluye también el salpicadero. Unas gafas de sol, un libro, un jersey, el móvil o cualquier otro objeto puede acabar en este lugar.

¿Qué pasa entonces? Que llegamos a una zona con tráfico y tenemos que dar un frenazo o entramos en una rotonda y entonces los objetos que habíamos dejado salen disparados para los lados o se caen sobre el asiento del copiloto con un acelerón.

En ese momento lo que hacemos es tratar de cogerlo al vuelo o reaccionar de manera que no se caiga, con lo que nos “olvidamos” del volante y de la carretera, arriesgándonos de nuevo a tener un accidente.

En verano no es difícil llevar las ventanillas bajadas, coger una rotonda y que las gafas salgan “volando” o casi por la venta. ¿La solución? Guardar las cosas en alguna zona más estable, véase el suelo del asiento del copiloto, los “pies” de los asientos traseros o incluso el maletero o poner una pegatina antideslizamiento.

6. Olvidar que los neumáticos hay que cuidarlos

Conducir un día tras otro, con cambios de temperatura y sobre todo tipo de terrenos hace que, de forma natural, lo neumáticos se desgasten y/o se desinflen. Es muy habitual no revisar la presión de los neumáticos ni el nivel de desgaste lo que supone por un lado un aumento del consumo de combustible y también una pérdida de agarre sobre el asfalto.

La presión de los neumáticos debe ser revisada, en invierno cambia la presión recomendada, para llevar los niveles en el punto óptimo. Puedes consultar nuestra tstrong>tabla de presión de neumáticos por marcas para saber el nivel recomendado para tu coche.

La banda de rodadura, como ya hemos comentado otras veces, debe tener una profundidad mínima legal de 1,6 milímetros, tanto en coche como en moto, aunque las prestaciones empiezan a reducirse a partir de los 3 mm.

¿Cómo puedo hacer que mi coche dure más?

Un coche tiene una vida útil que puede variar mucho dependiendo si se cuida el coche o no. Nosotros recomendamos tomar una serie de precauciones o cuidados, que no son complicados pero que pueden hacer que tu vehículo dure más años a pleno rendimiento. Lo que está claro es que cuidar tu coche puede alargar su vida al máximo y retrasar la compra de uno nuevo.

Descubre nuestras claves para que puedas presumir de coche longevo y, lo mejor de todo, ahorres en mantenimiento y en la compra de un vehículo nuevo:

Procura no llevar peso innecesario, lleva el maletero vacío. No recomendamos llevar nada que no vayamos a utilizar porque a más peso, más consumo.
Dale tiempo a tu coche, no revoluciones el motor aún frío porque necesita un calentamiento. Puedes darle un minuto antes de iniciar la marcha.
Evita apoyar el pie izquierdo en el embrague innecesariamente ya que, aunque sea levemente y creas que no, el mecanismo actúa y las piezas se desgastan.
Mejora tu conducción: evita frenazos innecesarios, reduce la velocidad al pasar por un badén, adapta cada marcha al cambio de velocidad, no golpees bordillos, etc. Parece lógico pero muchas veces se conduce impulsivamente y no con cabeza.
Realiza las revisiones pertinentes, gracias a ellas descubrirás las averías antes de que lleguen a más. Nuestra recomendación es siempre evitar que llegue a producirse una avería, un mantenimiento periódico puede costar menos que una avería de alto coste de reparación.
Comprueba los niveles de tu coche: presión de los neumáticos, nivel de aceite, anticongelante, profundidad de la banda de rodadura de los neumáticos, filtros de aire, etc.
Repasa las juntas de goma: Con el tiempo y también por culpa de los agentes externos, la goma del coche puede cuartearse, para evitarlo cubre el salpicadero con renovadores de goma cada cierto tiempo.
Lava el coche cada cierto tiempo, evitarás la acumulación de suciedad que es el mayor foco de corrosión de la pintura. Además, si aplicas cera una vez al año, evitarás que penetre la humedad y la pintura dure más.
A veces lo barato sale caro. Un buen aceite, por ejemplo, puede durar más si es de mejor calidad y la diferencia de precio no es tan abismal. Tenlo en cuenta para todos los componentes de tu coche.
Si conduces con nieve, procura lavar después tu vehículo porque la sal de los vehículos quitanieves puede provocar óxido en los bajos de tu coche.
Evita portazos y evitarás desajustes en la carrocería o ruidos molestas en la conducción.
Si tienes posibilidad de dejar tu coche en un garaje durante la noche, esto será muy beneficioso porque evitarás que esté expuesto a las inclemencias del tiempo, que acortarán la vida del vehículo.
Batería: mantén los bornes engrasados con vaselina. Podrás aumentar su vida en un 25%. Otro punto importante, si vas a dejar de usar el vehículo durante más de 45 días convendría que desconectaras el borne negativo para que no se descargue.
Evita bajar las ventanillas o encender la radio con el motor apagado. Esto acorta la vida de la batería.

Una cosa esta clara, cuanta más atención le prestes a tu coche, mejor uso le podrás dar y así alargarás su vida. Dedícale unos minutos al mes y así podrás evitar males mayores y también ahorrar en combustible.

Consejos para hacer un viaje en coche más cómodo

Estamos en pleno verano y es habitual que muchos conductores se muevan a su destino de vacaciones en coche. Los hay que viajan cerca pero también los hay que se recorren media España. Para ambos, hemos recopilado una serie de consejos para que el viaje en coche, sea cual sea el destino, no se haga pesado:

Colocar bien el equipaje:

Es fundamental pensar qué necesitamos llevarnos realmente y también saber cómo organizar bien el maletero. No debemos tener maletas en el interior que nos incomoden ni tampoco en la bandeja del maletero porque un frenazo fuerte puede hacer que se caiga sobre los ocupantes.

Tampoco hay por qué llevar objetos sobre los pies del copiloto si no es estrictamente necesario. La visibilidad del conductor es fundamental, así que, en la medida de lo posible, se debe viajar sin tapar la ventana trasera.

Planificar la ruta:

Se viaja más tranquilo cuando se conoce bien la ruta por lo que recomendamos mirarla bien antes de salir y, aunque se puede no memorizar, sí nos dará una idea. Si durante el viaje no sabemos qué camino tomar, conviene avisar con tiempo al copiloto para que esté prevenido de mirarlo o tener correctamente instalado el GPS.

En ningún caso debe producirse una situación de tensión por no saber por dónde ir y, lo peor de todo, tener que decidirlo en último momento pudiendo provocar algún volantazo peligroso. Es mejor parar en una gasolinera antes de llegar al punto conflictivo para revisar bien el camino.

Consultar el estado de las carreteras:

Bien a través de la radio o de una aplicación para el coche como Waze o Drivies, se puede consultar si existe algún accidente o atasco importante que nos vaya a suponer una larga espera.

También podemos ver en tiempo real las cámaras de Tráfico con la app de la DGT. Estando prevenidos quizá podemos tomar algún camino alternativo o realizar una parada para descansar.

Viajar con una temperatura óptima:

Quienes viajan en un coche sin aire acondicionado o con un calor excesivo puede verse irritados por esta situación y comprometer la tranquilidad del coche. Por eso lo más recomendable es tener una temperatura confortable para todos (el frío excesivo también puede ser molesto).

Podemos comprar unos parasoles para las ventanas y también conviene verificar antes de viajar si el coche necesita una carga de aire acondicionado o un cambio de filtros. No hay que olvidar que los malos olores provenientes del circuito de aire acondicionado no son algo normal.

No tener prisa por llegar:

Sabemos que llegar al destino de vacaciones es una necesidad mayor pero hay que ser realistas y saber que tenemos un número de kilómetros por delante y, no por correr más o parar menos se va a disfrutar más el viaje.

Normalmente es más agradable para todos un viaje en el que se pare para estirar las piernas e ir al baño un par de veces que ir encerrados muchas horas, lo que puede fomentar el cansancio del conductor y también de los pasajeros.

Conducir cómodo:

Aunque parezca lógico, muchas veces no pensamos si tenemos el habitáculo preparado para afrontar un viaje. El reposacabezas debe estar regulado a la altura adecuada así como el respaldo y la distancia a los pedales, es clave estar cómodo.

Es posible que en la conducción a diario tengamos unos vicios que en una conducción prolongada para viajar puedan no beneficiar, como por ejemplo estar demasiado pegados al volante.

Comprobar que tu coche está en buen estado:

Antes de salir y, para no tener ningún susto en el viaje ni tener que parar en la media, conviene tomar una serie de medidas de seguridad. Lo más básico es comprobar la presión de lo neumáticos antes de salir, porque quizá estemos poniendo en peligro la seguridad de los pasajeros y, si no comprobamos si los niveles están correctos no lo sabremos.

Por otro lado hay que tener a punto una serie de elementos que puedes consultar en nuestro artículo de puntos clave que conviene revisar antes de viajar. Lo último que queremos es quedarnos tirados o tener un susto en carretera, así que recomendamos tomar medidas preventivas y no luego lamentarnos.

Acabamos recordando que, si necesitáis una puesta a punto o cualquier revisión, estaremos encantados de recibiros en nuestra red de talleres y también podéis pedir cita previa o presupuesto online.

¡Felices viajes a todos!

Viajar en coche seguro es posible con estas 9 claves

Si tienes previsto viajar en coche este verano, no debes de olvidar que la seguridad es lo primero. Por eso, hemos preparado una claves para que tomes algunas precauciones de seguridad que hagan tu viaje más cómodo o, mejor dicho, que no tengas que parar por ninguna avería o susto.

Comprueba presión de los neumáticos y los niveles de aceite, líquido de frenos, líquido de dirección y refrigeración.

Revisa el correcto funcionamiento del aire acondicionado. Además, si está sucio el filtro de aire acondicionado o de polen, ten en cuenta que puede generar malos olores, empeorar su funcionamiento e incrementar el consumo de combustible.

Las pastillas de freno son de vital importancia, en carretera puedes necesitar dar un frenazo importante y será mejor tener todo bajo control. Mejor tener la seguridad de que el sistema de frenado va a responder como esperas.

Las luces han de estar regladas sobre todo si viajas de noche y los faros limpios. Asegúrate de llevar luces de recambio, evitarás posibles multas si se te funde alguna, siempre y cuando seas capaz de manipularlas. En caso contrario acércate a tu taller más cercano.

Si hace tiempo que no utilizas tu coche, estate atento a la batería, puede dejarte tirado justo antes de salir y ya con el maletero lleno o, lo que es peor, en mitad del viaje. Consulta en nuestro plan de mantenimiento si debes cambiar tu batería o todavía le queda vida útil.

Fíjate en el correcto funcionamiento de los amortiguadores ya que forman parte del llamado triángulo de seguridad junto a neumáticos y frenos. El amortiguador tiene la función de absorber el impacto de las irregularidades del asfalto y, al mismo tiempo, aportar seguridad.

Cuanto menos peso lleves, más distancia de frenada tendrás ante un posible accidente y también disminuirás el consumo de gasolina.

En cuanto a la seguridad, no olvides llevar siempre tu rueda de repuesto, tus chalecos reflectantes, triángulos de seguridad y toda la documentación del vehículo en regla.

Organiza correctamente tu maletero y, ante todo, no lleves ningún objeto suelto en la bandeja, ya que con un frenazo puede provocar alguna lesión a los pasajeros al desplazarse sobre sus cabezas.

Una vez cumplidos todos estos requisitos, no olvides que una vez que subas al coche conviene descansar cada 200km para mantenerte hidratado y evitar comidas copiosas que pueden provocar somnolencia. Te animamos a conocer nuestros consejos para hacer más cómodo un viaje en coche.

Preparados, listos, VACACIONES… ¡YA! Felices viajes a todos.

8 puntos del coche a revisar y viajar en verano

El verano es un momento perfecto para viajar y olvidarnos del estrés. Pero para conseguirlo, hay que tener en cuenta que conviene realizar una revisión de los puntos vitales del vehículo antes de viajar si no se quiere tener sustos. De lo contrario, podemos quedarnos tirados, sufrir una avería en mitad de las vacaciones o reducir la capacidad de respuesta en caso de accidente.

Como no queremos que nada de esto nos ocurra, os damos unas recomendaciones de los elementos clave que conviene revisar antes de ponernos en marcha. Si necesitais revisar alguno de ellos o hacer un chequeo completo, podéis pedirnos presupuesto online o cita previa.

1. LOS NEUMÁTICOS, EL ÚNICO PUNTO DE AGARRE AL ASFALTO

Los neumáticos son el único elemento que nos une a la carretera, por lo que si están desgastados o la presión no es la adecuada, ¿no crees que el coche no responderá como esperas?

El límite legal de profundidad está en 1,6 mm. pero recomendamos que tenga un mínimo de 3 mm. para que responda a la perfección. Un neumático deteriorado o con una presión inadecuada aumentará la distancia de frenado y reducirá la estabilidad del vehículo, lo que aumenta la peligrosidad en la conducción.

2. EL ACEITE, FUENTE DE VIDA DEL MOTOR

Si el aceite no está en los niveles adecuados o está deteriorado, pondrá en riesgo el correcto funcionamiento del motor. Tener el nivel de aceite recomendado o hacer un cambio de aceite garantiza una larga vida al motor. De lo contrario podemos llevarnos algún susto innecesario.

3. NO VAYAS SIN FRENOS… SI NO QUIERES TENER UN SUSTO

¿Has notado que al frenar el coche no responde como debería o los discos chirrían? Esto ocurre porque los discos y pastillas de freno se van deteriorado lentamente por el uso. El problema viene cuando no nos damos cuenta de la pérdida de eficacia y un día los necesitamos y no responden como esperamos.

Si los discos o las pastillas están desgastados, a la hora de frenar, la distancia de frenado será mucho mayor de lo normal. Frena en cortas distancias y recuerda que también hay que tener un nivel correcto del líquido de frenos si quieres parar a tiempo.

4. LOS FAROS SON IMPORTANTES, DEJA QUE TE VEAN

Si la iluminación de tus faros es tenue, no te verán como esperas y, si las tienes mal regladas, puedes deslumbrar a más de un conductor. Por eso, es recomendable que tu taller compruebe con un regloscopio si te dejas ver correctamente.

A eso se añade la posibilidad de llevar algún piloto fundido y que no nos hayamos dado cuenta, poniendo en riesgo nuestra seguridad y la del resto de conductores.

5. SI TIENES QUE PARAR, QUE NO SEA POR LA BATERÍA DEL COCHE

La batería del coche tiene una vida útil y, con el tiempo, va perdiendo eficacia hasta que hay que cambiarla porque no responde.

Antes de que llegue el día en que te veas en el arcén esperando a la grúa, el taller puede descubrir si tu batería tiene vida suficiente para que circules sin riesgo de quedarte tirado o si debes cambiarla. No lo dejes al azar.

6. EL LIMPIAPARABRISAS DEBE QUITAR EL AGUA
Unos de los grandes olvidados suelen ser las escobillas limpiaparabrisas. Si cuando llueve no retira el agua correctamente o te deja el cristal sucio, probablemente tengas que cambiar las escobillas.

Aún más habitual es tener bajo el líquido limpiaparabrisas, que nos impedirá mantener limpio el cristal, restandonos visibilidad. No hay por qué temer a la lluvia de verano si se va bien equipado.

7. EL COCHE DEBE CIRCULAR RECTO

Si sueltas el volante, el coche no debe desviarse hacia un lado sino seguir en línea recta. Si te pasa eso significa que no está bien alineado, está desequilibrado.

Un golpe contra un bordillo o el desgaste puede ser el culpable. La revisión en el taller incluye una comprobación del estado del paralelo.

8. VIAJA SEGURO Y CON CONFORT
Los amortiguadores o la suspensión tarda en deteriorarse pero, cuando lo hacen, cada bache se convierte en una molestia y la seguridad se compromete notablemente. Un chequeo al sistema de suspensión nos aporta seguridad pero también confort de marcha.

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Cómo cuidar tu coche en los meses de verano

El calor puede hacer que tu coche sufra infinidad de pequeños problemas que pueden derivar en su paso por el taller. Si quieres evitar algunos de los más comunes sigue leyendo nuestros consejos de verano y olvídate de sustos.

FRENOS

Los frenos acumulan calor por sí solos al rozar las pastillas contra el disco, si además añades el calor del verano, la refrigeración es más difícil todavía. Por eso hay que evitar la conducción agresiva y procurar utilizar las marchas cortas, así evitaremos que los frenos se sobrecalienten y perderemos menos distancia de frenada.

LIMPIEZA

El calor estropea las gomas de los limpiaparabrisas y los rayos ultravioleta se comen la pintura de tu vehículo por ello es mejor tratar de aparcar el coche siempre a la sombra siempre que sea posible y limpiarlo de forma regular. También existen distintos productos para proteger la pintura de las agresiones del sol.

AIRE ACONDICIONADO

El circuito de aire acondicionado acumula durante todo el año polvo y bacterias que pueden hacer que se atasque, recuerda cambiar el filtro cada año o cada 15.000km. Asímismo también conviene hacer una revisión de seguridad del sistema de aire acondicionado porque puede que no enfríe suficiente debido a alguna fuga o que directamente necesite una carga de aire acondicionado.

NEUMÁTICOS

En verano se alcanzan temperaturas muy elevadas que afectan a la vida de los neumáticos, si la presión está baja puede acortarla hasta un 15% más. Por eso es recomendable que siempre se revisen las presiones, en verano mejor cada 15 días, y también es fundamental hacerlo antes de un viaje de larga distancia.

MOTOR

El motor es la parte más importante y si normalmente genera calor por su funcionamiento, en verano alcanza temperaturas aún superiores. Es importante vigilar la temperatura del motor, para ello existe el indicador de temperatura que debemos observar constantemente y asegurarnos de que la aguja nunca llegue a la zona roja para evitar quemar el motor. En caso de que eso llegara a pasar, detén el coche y espera a que se enfríe o acude a tu taller más cercano.

Si llegado un caso extremo de que no se enfriara, es recomendable encender la calefacción para ayudar a liberar el calor del motor.

Además de estos consejos, nunca está de más evitar que el coche pase largos periodos estacionado, encender el aire acondicionado y calefacción durante todo el año y sobre todo, el buen uso y pasar todas las revisiones recomendadas alargará la vida de tu coche.

¿Necesito una carga de aire acondicionado para mi coche? ¡Llega el calor!

¿Te imaginas viajando 500 kilómetros a tu destino de vacaciones a las 3 de la tarde con 30º C y sin aire acondicionado? Esta situación es más habitual de lo que parece pero se puede solucionar con una carga de aire acondicionado o una revisión del circuito. También se puede evitar siguiendo unos consejos que alarguen la vida posible de nuestro sistema.

Hace poco una persona nos contaba su mala experiencia veraniega por culpa del mal funcionamiento de su sistema de aire acondicionado, lo cual le sirvió para que, desde entonces, haya cambiado sus hábitos, porque nunca había revisado su sistema de aire acondicionado.

7+1 Consejos para que tu aire acondicionado no deje de enfriar

– Haz las revisiones pertinentes, siempre puede existir algún tipo de fuga en el sistema que sólo se notará cuando el aire acondicionado no enfrié. Si ya se ha producido esta situación fatal y notas menos fuerza en el aire al salir es posible que necesites recargar el gas o realizar una carga de aire acondicionado. En ese caso puedes acercarte a tu BestDrive más cercano para solucionarlo.

– Sustituye los filtros una vez al año (preferiblemente antes de verano) o bien cada 15.000km, tal y como recomendamos en nuestro plan de mantenimiento para el coche.

– Enciende alguna vez el aire acondicionado, por ejemplo para quitar el vaho de los cristales en un día lluvioso, y así evitarás que se acumule porquería en él, es importante que no esté mucho tiempo sin funcionar.

– Si al llegar a tu coche está muy caliente, antes de conectar el aire acondicionado baja las ventanillas y circula unos metros, con este gesto tan sencillo conseguirás bajar la temperatura del interior de forma natural y así tu sistema de aire acondicionado no trabajará a máxima potencia.

– Pon el ventilador si la bajada de temperatura no tiene que ser muy drástica, ahorrarás consumo de aire acondicionado.

– Recuerda que cuanto más uses el aire acondicionado, más rápido se consumirá. Por eso a la hora de usarlo conviene pensar si realmente es necesario o va a dar tiempo a que enfríe. Por ejemplo, si se va a realizar un trayecto muy corto en coche, seguramente sea mejor bajar las ventanillas antes de poner el aire.

– No obstruyas las salidas de aire ya que, si sale el aire por un rejilla en la que hay un soporte para el móvil, el circuito no funcionará correctamente y a la larga puede pasar factura. En ese caso, si no quieres quitar el soporte, cierra individualmente la rejilla de la misma.

Como último consejo recordamos que el consumo de combustible se produce al bajar los 22 grados, pudiendo llegar a aumentar en un 20 por ciento por lo que conviene usar el aire acondicionado cuando es necesario.

¿En que consiste una carga de aire acondicionado?

El aire acondicionado fluye a través de un circuito cerrado en el que circula un gas que, gracias a una serie de procesos, consigue que circule aire frío en el vehículo. Este circuito puede tener alguna fuga y no enfriar todo lo que debería.   Si esta situación se produce a pesar de haber seguido nuestros consejos, puedes acercarte a cualquiera de nuestros talleres. Igualmente, no olvides realizar una carga de aire acondicionado a tiempo antes de sufrir un imprevisto y sudar la gota gorda.

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Consejos para conducir con lluvia en cualquier estación del año

Para una conducción segura durante la temporada de lluvias, prevenir es curar. Esto quiere decir que el sentido de responsabilidad en carretera comienza antes incluso de subirse al vehículo.

Conociendo una serie de recomendaciones sobre cómo conducir con lluvia, podemos evitar sustos y malos ratos.

MEDIDAS DE SEGURIDAD PREVIAS:

1. Comprobar el buen funcionamiento y estado de las escobillas limpiaparabrisas ya que durante el verano la goma se seca y tras un tiempo, estos pueden arrastrar peor el agua de la luna delantera y trasera y hacer así que pierdas visibilidad.

2. El estado del neumático es primordial, comprueba siempre la presión de los mismos y el desgaste (a partir de 1,6mm de profundidad es ilegal circular aunque los fabricantes recuerdan que a partir de los 3mm las prestaciones se reducen).

3. El líquido y las pastillas de freno. Es importante pasar los mantenimientos recomendados por el fabricante. Puedes consultar nuestro completo plan de mantenimiento.

DURANTE LA CONDUCCIÓN CON LLUVIA:

1. Enciende el sistema antivaho antes de quedarte sin visibilidad.

2. La mejor ayuda es hacerse ver, por eso, no olvides encender las luces nada más subirte al coche.

3. Mantén siempre la distancia de seguridad, y con lluvia, aún más.

4. Conduce con cuidado ya que cuando empiezan las tormentas es cuando la calzada está más resbaladiza.

5. Si en algún momento te ves obligado a frenar no olvides hacerlo suavemente y con tiempo suficiente, así evitarás colisionar con el vehículo delantero, y es también la forma de avisar al conductor que va detrás de ti.

6. Si pierdes el control al pasar por un charco grande, coge el volante con fuerza y no frenes ni tampoco aceleres hasta recuperar el control del coche.

7. Trazar las curvas en la línea más recta posible aprovechando el ancho de la carretera.

8. Estar aún más atento a la carretera que de costumbre.

Por último, no olvidéis que el sistema de ABS hace que la rueda nunca se bloquee y de esta manera conseguiréis una frenada en línea recta y que, con niebla poner siempre las luces antiniebla, más aún si es de día, puesto que hay menos contraste y son más necesarias.

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